Anaitis

Anaitis

Diosa adorada por los lidios, los persas y los armenios. Se cree que Anaitis, en cierta manera paso a ser la Venus de los griegos, se le hacían grandes fiestas en la Armenia cada medio año. En estas ocasiones los sacerdotes conducían con gran prosopopeya, sobre sus hombros, una imagen de Anaitis, y, luego que la colocaban en un sitio preparado al efecto, danzaban en torno suyo, acompañados de la multitud que se entregaba a los excesosdelante del ídolo.

 

Aredvi Sura Anahita (Ar?dvi Sura Anahita) en la lengua avéstica, es el nombre de una figura cosmológica indo-iraní, venerada como la divinidad de 'Las Aguas' (Aban), asociada con la fertilidad, la virginidad, la sanación y la sabiduría. También está considerada como una diosa de la guerra.  Los guerreros pedían a la diosa que les ayudaran en la batalla, de la fecundidad y personificación del planeta Venus en el Zoroastrismo (diosa del Próximo Oriente). Su nombre significa «sin mancha», lo que indica su función como la Virgen María para los Cristianos. Creadora del mundo. También asociada con la promiscuidad sexual y la prostitución sagrada. Anahita o Anaitis en griego y Aredvi Sura Anahita (“Húmeda, Fuerte, Incontaminable”) en el Avesta y cuyo nombre es el mismo que el de un río mítico; esto parece ser una unificación de lo que originariamente fueron dos deidades originales. Era una divinidad adorada por los Lidios, los Armenios y los Persas, que parece corresponder entre los primeros a Artemis, y entre los otros a Afrodita (es la Afrodita de los persas y armenios). Nada importante se emprendía que no fuese bajo sus auspicios. Se celebraban en su templo las asambleas más importantes y le estaban consagradas las jóvenes más hermosas, que abandonaban su honor a los que iban a ofrecerle sacrificios. En su fiesta se reunían los hombres y las mujeres y bebían hasta embriagarse. Reside en la región de los astros y Ahura Mazda la ha destinado a velar sobre la creación. El mismo dios supremo prescribe, entre otros preceptos, a Zaratustra la adoración de Anahita. Dispensa la salud, vence a los Devas y viaja en un carro arrastrado por cuatro caballos blancos, alegoría del viento, la lluvia, la nube y la escarcha. Es venerada por héroes y antihéroes. Posiblemente de origen mesopotámico, su culto fue importante con Artajerjes II,  las estatuas y los templos fueron construidos en su honor durante el Imperio Persa. Cierto culto ha existido después en el Asia Menor. En Grecia, fue identificada con Atenea y Ártemis.